Y SI NO HAY NADA, ¿QUE? Nacemos, y al segundo siguiente, como si fuéramos un cuadro a subasta., como razias ya nos definen genéticamente: igual que su padre, ¡que va! calcado a su madre! -como si los progenitores pudieran incluso dudar de quien es la criatura. El tiempo transcurre y llegan años en los que parece es menester tomar una decisión: maestro como su padre, si es niño..- .- ¡Hombre, por dios! Que eso hoy por hoy es un poco vulgar. Está más valorado ingeniero de comunicaciones, médico… Si el resultado del parto es niña pues más de lo mismo, enfermera, azafata, cirujana. Es curioso, nunca he oído que nadie propusiese como futuro profesional “político”, quizás por que es intrincado conseguir padrinos a veces alejados de nuestras posibilidades. Nadie de los veladores por el futuro de la criatura se detiene, primero a ver si sus facultades dan para una u otra cosa, eso sí, se harán esfuerzos ímprobos, “cueste lo que cueste se ha de conseguir...” mucho menos en deten...
Pueblos, comentarios, poesía...