HOY TENGO GANAS DE TI.- Paseo por la alameda con tranquilidad meridiana, aprovechando el tiempo de sol que nos brinda la mañana, esquivo en otros días. Tengo la cabeza atolondrada de excesos etílicos de la noche pasada, la garganta áspera, los ojos legañosos. Con gran despreocupación observo la gente alocada por la calle para llegar al autobús, oigo el estruendoso ruido de las bocinas manejadas por conductores al borde del infarto, las mujeres con silletas donde transportan sus bebes unos aún dormidos, otros con un berrinche frenético y lo tomo como un descubrimiento porque hoy no tengo nada que hacer y hasta ahora no me había apercibido que esto es la rutina que yo cometo todos los días. En esto, en una ojeada distraída y monótona me fijo en ella, estaba allí, elegante, con su talle refinado, con su vestido de color verde oscuro ¡quién sabe de Valentino o de mengano! elegante, altiva, provocadora, con un diminuto pero coqueto gorro fucsia, posada sobre alfombra roja, dim...
Pueblos, comentarios, poesía...